Ser fiel en esta vida en general no es algo demasiado complicado simplemente se trata de entender lo que somos y aferrarnos a eso, es decir que para ser fiel al resto del mundo primero debemos ser fieles a nosotros y el ser fieles a nosotros implican más cosas que simples palabras, es decir que si somos fieles a nosotros mismos como personas traicioneras, entonces aunque el resto del mundo opine lo contrario esa persona será fiel a si mismo y eso es lo importante, la congruencia de las acciones que realizamos, cierto es que las personas somos contradictorias en general pero mientras esta contradicción sea coherente con lo que pensamos y sentimos lo demás dejará de ser importante.
La nobleza es otra característica que me parece muy importante pues la nobleza viene después de la fidelidad, la nobleza es esta relación de la fidelidad con los demás, ser noble implica más que ser bueno y ayudar a alguien, es tomar estas personas en cuenta y siempre anteponer el bienestar de estas relaciones ante cualquier situación.
Definitavamente creo que hay personas fieles pero ¿nobles?, cada vez tengo más dudas...
2 comentarios:
Digamos que la fidelidad está de moda y la nobleza no. Sigo firme en mi tesis de que vivimos en sociedades egoístas con el discurso reciclado de "alcanzar los sueños a cualquier costa", "ideales firmes"...etcétera. La verdad es que dentro de esta lógica es imposible ser los dos. Anteponemos siempre el yo. La nobleza va en detrimento porque ya no somos sensibles a la existencia de los demás.
Saludos, me gustó mucho tu post.
La nobleza está pasada de moda, a nadie le gusta la gente noble y generalmente se confunde nobleza con pendejismo. La fidelidad también es algo muy retro, en esta época donde sólo importa la satisfacción personal instantanea ser fiel se interpone con alcanzarlo.
Me gusta el concepto de fidelidad personal que manejas. Si uno no es congruente con lo que piensa difícilmente alcanzará un estado de "felicidad" que supuestamente es la meta de todos.
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